En los últimos años la necesidad de conservar los recursos naturales y preservar el planeta es indispensable para colaborar en su cuidado. Por ello, la utilización de fuentes de energía inagotables cada vez es más tendencia.

La energía geotérmica es aquella energía renovable que se almacena en forma de calor y se obtiene mediante su aprovechamiento, situada por debajo de la superficie sólida de la tierra. 

Se dispone de ella los 365 días del año las 24 horas del día, siendo una de las energías renovables más eficientes. Resulta aprovechable en cualquier parte del mundo y a diferencia de otros sistemas, las condiciones meteorológicas del momento no influyen. 

La energía geotérmica también elimina la dependencia de los combustibles fósiles (gas natural, propano, gasoil) gracias a que consigue una disminución de emisiones de CO2.

Su funcionamiento se realiza mediante bombas de calor geotérmicas que aprovechan la temperatura constante del subsuelo extrayendo la energía a baja temperatura mediante un proceso de compresión realizado en un circuito frigorífico. Cuando la temperatura alcanza una temperatura elevada, se puede utilizar esa energía calórica tanto para calefacción, como para agua caliente, y con la inversión del ciclo frigorífico, para producir frío.

La energía geotérmica es capaz de abastecer hasta el 100% de las necesidades de calefacción y de agua caliente sanitaria de edificios, locales, viviendas, etc., permitiendo así calentar la vivienda en invierno y refrigerarla en verano. 

Entre sus ventajas se encuentran: 

• Mantenimiento mínimo y silencioso.
• Sin humos.
• Costes de operación reducidos.
• Altamente fiable.
• No se necesita caldera.